(Bisquerra 1990)
La Orientación Vocacional es un PROYECTO de VIDA cuya construcción o elaboración forma parte del proceso de maduración afectiva e intelectual de una persona y donde la vocación se construye históricamente en interacción con la familia, el entorno de oportunidades sociales y las disposiciones personales. Permite saber hacia dónde se dirige un ser humano, cuál o cuáles son sus metas de realización ocupacional, profesional.
Sin embargo la vocación no deja de ser un proceso dinámico en el tiempo, sufre cambios y muchos de ellos pueden ser experimentados con un genuino temor, incertidumbre y angustia. Las preguntas básicas que respondimos al inicio del Proceso vocacional, son reemplazadas ahora por nuevos interrogantes: ¿Quién SOY?,¿Cuáles son mis debilidades y fortalezas, ¿Qué necesito Aquí y Ahora? y estas preguntas comprometen a toda la personalidad pues tienen relación con la identidad de los Cambios y con todo lo que esto moviliza y desestructura. El NUEVO proyecto vocacional-ocupacional pone al descubierto parte de nuestra problemática personal y el desafío incluso de mitos familiares y prejuicios propios. Desarrollar una visión positiva de la adversidad o situación de estrés, poniendo el acento en las posibilidades, habilidades, potencialidades y fortalezas y no en los factores de riesgo, carencias, debilidades, limitaciones, generará una mirada esperanzada estimulando la RESILIENCIA. Cuando una persona se enfrenta a una adversidad poniendo en marcha habilidades personales y apoyándose en recursos y personas que lo rodean, logra superar la situación, alcanzando un nivel de crecimiento superior que incrementa su propia resiliencia. Los RECURSOS internos como externos con los que se cuente actúan como factores de protección y amortiguan la adversidad, de allí la importancia de generar RECURSOS que fortalezcan la capacidad de Resiliencia.
La verdadera VOCACIÓN o "llamado" es SER y SER en felicidad y todo replanteo en relación con la manifestación de este llamado, necesita ser atendido y cuando se lo atiende; la VOCACIÓN se transforma en MISIÓN y se re-orienta en función de la Misión personal la cual empieza con el bienestar y la alegría del propio SER que se expande hacia otras personas. Aprender a confiar en uno mismo, a ser más autónomo e independiente, a dialogar y negociar los límites, a desarrollar creatividad, a incentivar la responsabilidad sobre las consecuencias del propio comportamiento teniendo una actitud moderada frente al fracaso; son formas de promover RESILIENCIA.
Los CAMBIOS vocacionales-ocupacionales estimulan nuestro potencial biopsicológico para procesar información que al ser activada genera soluciones y permite resolver problemas. Este es el concepto en el que se basa la Teoría de las Inteligencias Múltiples, son POTENCIALES activados o NO, cada uno diferente de los demás, independiente de otros pero a la vez, formando un sistema en sí mismo, sin que una inteligencia sea mejor que la otra. Hoy este conjunto de potencialidades pueden ser identificadas, desarrolladas y empleadas en los Procesos de Re-orientación Vocacional y constituyen un nuevo paradigma en permanente estudio y evolución.
-Master María Inés Figueroa
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